Saliendo de la caverna

Caverna 1El presente relato es continuación del publicado el 17 de diciembre de 2012 bajo el título “Entrando a una caverna”.

Esa luz. Esa luz que ciega está allí. Parece inalcanzable y sin embargo puedo tomarla entre las manos extendidas, mientras me atrae hacia un espacio nuevo. Es una luz mujer, de contornos suspirados por un aroma inconfundible, por el rumor de una voz que no se olvida. Me atrapa entre caricias sutiles con el calor de un sol inapelable, de una estrella viscosa hundida en los pliegues de la piel. Mis pies caminan solos, insomnes, llevando la carga del cuerpo hacia adelante. Mis piernas son las ramas frágiles de un árbol incipiente que se columpia al viento. Un paso más y la luz me ciñe de infinito. Un paso más y nuevamente estoy en el lugar del que partí.

Este relato forma parte de la serie “Relatos y correlatos”.

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