GPS de vida

Muro 2

A la vera de un tiempo que se agota en instantes sutiles, encorvando las espaldas con el yugo de sentidos sin razón, el hombre destina su destino en pasos limitados por muros de concreto que enmarcan el sendero y cercan la mirada. Sólo a veces el hombre se remonta sobre el vallado gris tanteando atardeceres de soles inconclusos y nubes con forma de distancia. Sólo a veces “periscopia” la vista alrededor de sí para ensanchar el campo de conciencia. Sólo a veces refleja los reflejos de la luna sobre la superficie acuosa de la mente. Aun así, camina en línea recta sobre una autopista retorcida, iluminada apenas por el farol brillante de la fe.

Este texto forma parte de la serie “Reflexiones sin flexiones”.

Ejercitación del taller literario

Camino de gravaEscritura densa en el primer relato. Escritura sintética en el segundo, utilizando los mismos términos que en el primero

El camino (escritura densa)

Grava. Grava sobre grava, inmensa en su inmensa inmensidad. Miles de pasos que asoman invisibles por entre la piedra rojiza acompasando la ternura de los gajos que se esparcen hacia un sol que no ven. Grava y espacios infinitos. Grava y sentidos sin sentido. Grava y apenas un instante. Grava y un súbito final.

 Apenas un instante (escritura sintética)

Grava, inmensa inmensidad.

Pasos invisibles acompasando la ternura de los gajos

hacia un sol que no ven.

Espacios infinitos,

sentidos sin sentido

y un súbito final.

Este relato forma parte de la serie “Relatos extravagantes (algunos incluso raros)”.

Las cuatro sombras

Cuatro sombras gemían ocultas en las sombras. Una era el espíritu del tiempo que se sumía en sí aguardando el desatino del después. Otra, el hálito de la desesperanza pugnando por burlar el abandono. La tercera, el resplandor ignoto de los propósitos frustrados. Nunca supe de la cuarta hasta hoy, en que la oscuridad cegó mis ojos y una luz oportuna acompañó mis pasos.

Este relato forma parte de la serie “Relatos extravagantes (algunos incluso raros)”.