Chistes inocentes II (o que ustedes nunca harían)

Musical – Muchas melodías son confusas. Otras, en cambio, son con redondas, blancas o corcheas.

Histórico – Penélope le dice: -Ulises, no escuches a las sirenas. Ulises, ofuscado, le responde: -¿Y qué querés que haga, si soy chofer de ambulancia.

Sordera – Jorge visita a su amigo en la cárcel. Al verlo, le dice: -Pedro. Tenés que hacerte ver los oídos. Yo te dije que hicieras una estufa, no una estafa.

Discriminación – El Departamento de Estado de los Estados Unidos pide Visa a los argentinos para entrar en su territorio. Hubo quejas por discriminación. Fueron de American Express, Mastercard y Diners.

No sinónimos – No es lo mismo anonadado que cola mojada.

Influencia – En medio de esta pandemia el fabricante de respiradores artificiales hace valer sus aspiraciones.

Paradoja – Se dice que Ernesto Sábato escribía sus novelas los domingos.

Remedio – Para curarse del cáncer, Johan Sebastian Bach usaba flores de él.

Destierro – El monje budista fue desterrado del monasterio porque no compartía el entusiasmo de los demás monjes por Bhrama. Él era un fanático de Heineken.

Novicionario – Tercera entrega

Diccionario 2A continuación les presento una nueva entrega del Novicionario.

Recuerden que les estoy planteando sólo una definición de palabras por cada letra del alfabeto.

Aquí van:

Abrojo: Antónimo de cerrojo.

Banderola: Insignia patriola.

Campana: Perro de tela que suena.

Delfín: Mamífero acuático que siempre llega en último lugar.

Económico: Repetición de sonidos no pertenecientes a un mono.

Festejo: Juego que se juega usando un sombrero turco y discos de madera.

Genial: Femenino de conocido analgésico.

Hiperbólico: Que sufre de varicocele.

Izquierda: Lugar hacia donde señala mi esposa cuando quiere que doble a la derecha.

Jefe: Persona que está en ese puesto porque demostró que no sabe.

KuKlux Klan: Blancos que “hacen cosas de negros”.

Léxico: País de Alérica del Norte.

Mantra: Cobertor de la crama.

Novio: Miró pero…

Oculta: Vocal de preparación exquisita pero poco manifiesta.

París: Ciudad donde te ordenan dar a luz (¿Por eso le dirán la Ciudad Luz?)

Queso: ¿Quién te cré…?

Remedio: Nota musical en la mitad.

Santurrón: Patrono de las golosinas que hacen mal a los dientes.

Todavía: Rieles y durmientes.

Usurera: Vocal de origen austral.

Vigilada: Observé a gente tonta.

Wichita: Mona de Witarzán.

Yo-yo: Juego egoísta.

Zarzaparrilla: Barbacoa vegetal.

Estos textos forman parte de la serie “Novicionario”.

Descripción de un placebo

Placebo

La suave cobertura blanquecina oculta bajo la superficie de la gragea la supuesta fortaleza de la medicación. Pero en realidad el remedio ya existe en la mente del paciente. Al ingerir la tableta milagrosa, el enfermo cree estar absorbiendo la cura para su dolencia. No percibe que es sólo su fe prodigiosa la que le ofrece el milagro improbable de la sanación.

Este texto forma parte de la serie “Reflexiones sin flexiones”.

Cuántica

El golpe abolló la llanta de la rueda delantera derecha, que comenzó a perder el aire a borbotones y a tironear el vehículo hacia ese lado, a consecuencia del hoyo que se había formado hacía ya dos semanas, cuando el asfalto cediera ante la lluvia y el peso del camión de materiales que llevaba tejas destinadas a reparar el techo de la casa arruinado por el granizo caído durante el mes anterior, y que recién después de casi otro mes de producido el chubasco el dueño pudo combinar para arreglarlo, porque antes de entonces el techista que haría la reparación se había accidentado al caer de la terraza de un vecino al que le estaba colocando la pizarra destruida por el hielo y recién ahora se estaba recuperando de los golpes y retomando el trabajo pendiente. En la brusca maniobra provocada por el desnivel de la calle, el coche atropelló a un ciclista que se le había adelantado por la derecha, apurado por llegar a la farmacia antes de la hora de cierre para comprar los remedios que el médico –que había llegado tarde a la consulta por haberse quedado dormido por efecto de la trasnochada del día anterior, cuando asistió al casamiento de la hija de su hermano, quien había recompuesto su situación familiar luego de haber enviudado del primer esposo fallecido en un lamentable accidente de aviación- le recetara unos minutos antes a su hijo, enfermo de una extraña dolencia adquirida en el colegio el día anterior, cuando a pesar de la lluvia el profesor de educación física los había hecho jugar al fútbol en el patio abierto de la escuela. El conductor del automóvil se apeó para auxiliar al desconocido, justo en el momento en que el semáforo de la esquina, que hacía veinte años que había sido colocado y que en ese lapso sólo falló el día en que un camionero borracho porque había sido despedido de la empresa en la que trabajaba se lo había llevado por delante, quedó nueva y repentinamente fuera de servicio, provocando un embotellamiento de tránsito que impidió que la ambulancia –que había sido llamada de urgencia por un vecino comedido que estaba comprando una revista en el kiosco de diarios para entretenerse porque le había fallado la cita con la novia, debido a que ella ya había visto la película a la que él la invitara y se había enojado yéndose a tomar el té con dos de sus tres amigas de la infancia, porque la tercera había viajado a Barcelona para asistir a un Congreso sobre moda infantil- llegara a prestarle los primeros auxilios al ciclista, debido a lo cual el conductor del automóvil, que no podía usar el suyo para llevar al ciclista al hospital, llamó a un taxi que pasaba vacío al haber dejado al anterior pasajero en la esquina previa, ya que la hermana de dicho pasajero lo había citado en esa esquina para darle la parte del dinero que le correspondía por la venta del departamento que ambos habían heredado de un tía viuda en segundas nupcias y que esa misma mañana el gestor de la inmobiliaria, llamado José porque había nacido un diecinueve de marzo y la familia quería mantener la tradición religiosa, cobrara al nuevo dueño al firmar el boleto de compraventa en la inmobiliaria que quedaba a dos cuadras del lugar; el taxi vacío, decíamos, en el cual automovilista y ciclista viajaron hasta el nosocomio más cercano. Al llegar, fueron atendidos de inmediato  y cada uno pudo volver rápidamente a sus ocupaciones.

Este relato forma parte de la serie “Cuentos incontables”.

Textos improbables

11. Proverbio
Hay un proverbio chino que dice: “Yang chi Shangai, shang yu Beijing”, que significa ”Yang chi Shangai, shang yu Beijing”.
12. Castigo
Al presidente de la FIFA lo echaron porque lo sorprendieron fif… haciendo cosas raras.
13. Remedio
Para curarse del cáncer, Johan Sebastian usaba flores de él.
14. Destierro
El monje budista fue desterrado del monasterio porque renegaba de Bhrama. Él prefería Heineken.
15. Casualidad
Ganar en el bingo es una lotería.

Estos textos forman parte de la serie “Textos improbables”.